Los préstamos rápidos son préstamos para las personas que necesitan urgentemente obtener pequeñas sumas de dinero de forma rápida. La principal característica de estos préstamos radica en la rapidez del desembolso de la liquidez solicitada: el crédito se paga incluso en las 48 horas siguientes a la concesión del préstamo.
Además, por lo general muchos préstamos rápidos, como por ejemplo los préstamos online, requieren poca cantidad de papeleo. Existen distintas paginas que ayudan a encontrar prestamos rapidos sin papeles como por ejemplo https://boletinfinanciero.es/prestamos-rapidos-sin-papeles/
Cabe destacar que los pequeños préstamos rápidos son la forma de financiación preferida por los jóvenes estudiantes, que suelen encontrar varios obstáculos para acceder al crédito por carecer de las garantías necesarias. Aquí puedes encontrar con más facilidad prestamos para jóvenes https://boletinfinanciero.es/prestamos-para-jovenes/.
Los solicitantes pueden ser estudiantes a tiempo completo o incluso aquellos que estudian y trabajan, pero no tienen unos ingresos fijos que les permitan solicitar préstamos personales tradicionales. La fuerza de los préstamos rápidos para estudiantes reside en los tipos de interés favorables que sirven para ayudar a los jóvenes a devolver el dinero.
Los préstamos rápidos para estudiantes entran en la categoría de préstamos para fines especiales: la suma prestada debe utilizarse únicamente para fines de estudio. El dinero puede utilizarse, por ejemplo, para pagar las tasas universitarias, nuevos cursos de educación, etc.
Otros pequeños préstamos rápidos para estudiantes pueden solicitarse directamente en línea y el dinero, una vez aceptada la solicitud, se abonará directamente en la cuenta corriente en un plazo de 48 horas.
Por lo tanto, los pequeños préstamos rápidos para estudiantes tienen tipos favorables y modalidades de reembolso muy flexibles: estos préstamos están destinados únicamente a quienes están ocupados estudiando. Algunos bancos han firmado acuerdos con universidades en los últimos años.
Haciendo un balance de los pros y los contras de los préstamos online instantáneos, la posibilidad de obtener liquidez rápidamente es una gran ventaja para quienes tienen que hacer frente a situaciones inesperadas. Asimismo, la presentación de la solicitud por vía electrónica acorta la distancia entre el banco y el cliente.
Quienes optan por solicitar un préstamo online también están sujetos a las limitaciones de los horarios de apertura de las oficinas físicas. Un obstáculo al que suelen enfrentarse quienes acuden a una sucursal tradicional. Los procedimientos en línea son también muy sencillos, por lo que están al alcance de quienes no tienen especiales conocimientos informáticos.
Sin embargo, hay distintas desventajas que debemos tener en cuenta. A menudo, los bancos que conceden préstamos rápidos online imponen costes elevados a cambio de la rapidez con la que se tramita el expediente. Y no se habla sólo de las comisiones y de la tramitación: los préstamos rápidos suelen ser sinónimo de tipos más elevados que los aplicados a los préstamos del mismo importe concedidos en tiempos ordinarios.
Los costes más elevados no son el único aspecto que reduce la conveniencia de los préstamos online instantáneos. La ausencia de condiciones claras también hace que este tipo de producto sea especialmente delicado. Es habitual que los clientes sean atraídos por presupuestos y anuncios online muy ventajosos, pero luego en la práctica se encuentran con propuestas de préstamos con condiciones muy diferentes.
Esto ocurre porque se acude a canales de distribución de productos financieros que no ofrecen un asesoramiento profesional personalizado y presencial. Este es el caso de los comparadores online, que se centran en la reducción de los tipos y no en la experiencia crediticia.
Sin embargo, estas desventajas pueden ser evitadas acudiendo a asesores de crédito especializados que trabajan para entidades con servicios digitales avanzados. En unos pocos pasos, la solicitud de préstamo es analizada, recopilada y enviada con el apoyo de un profesional.